Andrés Reinaldo quiere ser nórdico (Updated 3)

Hay, madre, un sitio en el mundo, que se llama

Oslo. Un sitio muy grande y lejano y otra vez grande.

Pues sí, como lo oye, Andrés Reinaldo quiere ser nórdico. El señor Reinaldo publicó un artículo de opinión en el Nuevo Herald el viernes en el que culpa las políticas neoliberales por el colapso financiero en los Estados Unidos.  El articulista habla de desregulación y repite así algo que ha andado en la boca de muchos por estos días. Hay ciertos términos que se repiten con el ánimo de que se graben en la mente de las personas y convertirlos en verdades sólidas que no admiten cuestionamientos de ningún tipo. Se convierten en dogmas. Conducen a preguntas como: ¿Ud. cree en el calentamiento global? ¿Sí o no? Es decir, la ciencia y los razonamientos lógicos se echan a un lado y el concepto se convierte en un dogma, una creencia, una fe; de ahí la pregunta que sólo busca una afirmación o una negación. Esto es pura propaganda al estilo de Joseph Goebbels.

No sé que de que desregulación habla el señor Reinaldo que ha ocurrido en los últimos veinte años cuando durante este periodo se ha visto un incremento sin igual del poder del gobierno federal en varias esferas de la economía y de la vida común del ciudadano. Cualquiera que ha intentado abrir un negocio pequeño en este país conoce todas las regulaciones burocráticas que ahogan estas iniciativas individuales. En el sector hipotecario, Fanny Mae y Freddy Mac fueron las primeras compañías en caer. Todo el mundo sabe que estas dos compañías son un invento de los demócratas para darle préstamos a gente que quizás no calificaba para ellos y así ganarse votos y contribuciones a sus campañas políticas. Son compañías estatales y fracasaron, Sr. Reinaldo.

Otras políticas que han sido aplicadas en los últimos años y han ahogado la economía, han incrementado el poder del gobierno federal, o han simplemente fracasado incluyen la prohibición de explotar los yacimientos petroleros del país, los paquetes de estímulo a los contribuyentes (los tax rebates), la legislación educacional conocida como No Child Left Behind, y el Patriot Act. El gobierno federal ha aumentado su influencia en muchas esferas. Eso es innegable. 

Hay otro alemán que quizás Andrés Reinaldo haya leído bien que dijo las crisis del capitalismo son cíclicas. Claro, eso lo pudo haber dicho cualquiera. Nada puede crecer todo el tiempo, ni siquiera la economía y hay momentos de reajuste, que es por lo que estamos pasando ahora.

Cuando el neoliberalismo les estaba dando beneficios, nadie se quejaba. Ahora de pronto muchos odian el capitalismo y añoran el control estatal que les devuelva la calma. Hablan de manera edulcorada de cómo en los países nórdicos no se han visto afectados por las recientes crisis debido a las regulaciones del gobierno. Creo que los que dicen esto van a tener, como se dice en inglés, “un despertar rudo” (a rude awakening). Ya los mercados globales empiezan a desinflarse, no sólo el de los Estados Unidos. Yo sé que ahora muchos buscarán la mano consoladora del estado, pero les advierto que un día esa mano les va a abofetear el rostro.

 El gobierno no es la solución. Nunca lo ha sido.

Updated: 10-13-08....Por favor lean este esclarecedor artículo sobre el tema. Usted también, Señor Reinaldo.

Updated: 10-13-08..Economista americano crítico de la administración de Bush y del partido republicano gana premio Nobel. But of course!