Thursday, April 3, 2008

Dulcinea



Oh, tierna dulcinea que se esfuma como aquella luz
que ya no existe y que insiste en sorprendernos.
La noche es larga y el cuchillo brilla lúgubremente
entre aquella esperanza y esta desilusión.
Espejismos que navegan sin velas sobre un mar
de insinuantes arenas de lujuria.
Oh, las profundas aguas del vacío que se ensanchan
detrás de las distancias apenas distinguibles.
Las manos construyen un efímero paraíso.
No hay placer que dure, no hay luz que no se apague,
no hay mañana que no se evapore con el sol de la tarde.
No hay paraíso que perdure mas allá de la desilusión.

1 comment:

Anonymous said...

dulcinea es la que más me gusta del quijote
la danáide