Monday, November 3, 2008

Gajes del oficio

 

old bookshelf 

Sentado en un sucio bar,

un disco sonando en el fondo,

el borracho se da un trago,

el último trago:

en unos instantes su hígado

reventará como el globo de un niño

--ha tomado tanto en su vida.

Acostado en su cómoda cama,

una melodía clásica sonando en el fondo,

el gordo se sopla la nariz,

se mesa el cabello,

se amasa la inmensa panza

y se dispone a darse un buen banquete

que será el ultimo:

el magro corazón no podrá,

--ha comido tanto en su vida.

Tirado en el suelo,

despeinado, flaco, sediento, hambriento,

el tictac de un viejo reloj sonando en el fondo,

el poeta escribe el gran poema

que siempre buscaba y que al fin encontró:

el poema que resume la belleza de su mujer,

las rarezas de la vida,

los milagros de la creación,

el destino que es la muerte,

el poema que siempre estuvo escribiendo,

el poema que ha costado tanto papel,

tanta tinta, tanta vida, tanta poesía,

el poema en fin que será el ultimo:

el poeta se quedará dormido en el suelo,

justo debajo del librero que

(tan atiborrado de libros

y poemas mal escritos)

muy tranquilamente se desprenderá de su lugar

e ira a caer justo en el cráneo del poeta

que se reventará y llenará de sangre

papeles, pisos, papeles,

libros y poemas.

2 comments:

Isis said...

Lo dices todo.

Ernesto G. said...

Isis, es un poema viejo, medio wichinesco, como habras notado. Ya estoy de regreso.